20 jun 2012



El sol tardío y el ansia de palabras,... que inunda los horizontes caídos nublando las entrañas de rutinas melódicas en las que no escapamos hacia ninguna parte y,... sin embargo,... nos llevan a otros sitios,... a lugares salvajes,...territorios inhóspitos de esos que la memoria ha llenado de trampas que pueblan los caminos a recorrer a oscuras.

Y el fuego que nos queda,... siempre tan necesario,... no llega a ser suficiente para alumbrar los días que aún siguen cayendo como una tarde olvidada de cualquier otro invierno dispuesto a naufragar en esa isla perdida en la que flotan,... al margen de los mapas,... todos nuestros silencios...


Mi cita con el pasado se produjo hace casi cuatro meses,... y espero que estés donde estés,.... me disculpes por no publicar mi recuerdo,... puesto que el duelo lo llevo colgado todos los días de mi vida...
Quizá ese día lo necesitaba para mí... Tal vez no me salía nada para escribirte... Pero ten por seguro que no te me vas del recuerdo,... que sé que es lo único que me queda...
Todavía recuerdo tantos detalles de tu vida... como de tu muerte... Todavía me llegan imágenes de tantos momentos pasados a tu lado... Todavía sigo pidiéndote ayuda,... como cuando nos sentábamos ante una puzzle esas eternas tardes...
Aquella madrugada,... en la que alguien te reclamó,... el gallo cantó dos veces,... el alba amaneció más tarde y nadie pudo evitar sentir que un trozo de nosotros se había apagado...
Desde mi humilde silencio,... espero que seas más feliz que cuando estabas aqui... Siento que mi deuda con el pasado ya está saldada,... aunque la deuda contigo nunca lo estará...
Espero que mis letras,... incoherentes y torpes,... te lleguen al lugar donde te encuentres,... y que sepas que,... decenas de días después se te sigue echando de menos... Recogeré mis lágrimas y te prometo que nos reiremos de ellas en cuanto nos volvamos a ver...
Jamás podré olvidarte,... mamá... Te echo tanto de menos...